Decidí ser maestra frente a grupo porque el destino puso en mi camino a la persona indicada, desde que ingresé a la normal de Teteles mi vida cambio por completo, con el tiempo he aprendido a valorar y querer mi trabajo.
La docencia representa una forma de vida, es cierto que hay momentos difíciles que me hacen dudar de mi fortaleza, pero todo tiene solución y es necesario encontrar obstáculos para darse cuenta que no todo lo sabemos y en ocasiones de la persona de quien menos esperamos recibimos una enseñanza.
Con el trabajo que realizo diariamente comprendo que tengo una gran responsabilidad, los niños siempre esperan que yo esté a su lado para desarrollar sus actividades, en cada grupo trato de orientarlos para que sean autodidactas, esto es muy difícil, porque quieren que se les digiera el conocimiento y de acuerdo con el constructivismo el sujeto es el responsable de construir su propio conocimiento. Al finalizar el curso muchos entienden mi dinámica y es grato ver como se desenvuelven, lo triste es cuando tengo que dejarlos y volver a empezar.
En el magisterio he encontrado la forma de ayudar a mis semejantes, con mis enseñanzas, consejos, ayudas pedagógicas puedo influir un poco en su manera de pensar y hacer las cosas.
Después de varios años de servicio he tenido satisfacciones, una muy notable fue cuando de proyectos académicos de Puebla eligieron a mi escuela para ser evaluada, mi grupo de segundo grado con 60 alumnos obtuvieron el segundo lugar a nivel estado, éste logro ha significado mucho para mi.
Posteriormente realizamos dos encuentros culturales con los alumnos de la escuela primaria “Rafael Ramírez Castañeda” de la ciudad y puerto de Acapulco, Gro, vinieron y fuimos, narrar cada acontecimiento seria como volver a vivir todos los años de servicio dedicado a la docencia y no es mi intención excederme, lo cierto es que los logros alcanzados son importantes porque mi escuela es rural, con carencias de todo tipo: no todos tienen el apoyo de sus padres, son muy pobres, no van al internet, hijos de campesinos y madres solteras, son muchos hermanos…
Pero lo que más satisfacción me da, es cuando veo el avance de mis alumnos, cuando empiezan a leer, a redactar por si solos, a resolver problemas utilizando sus propias estrategias, cuando comparten con sus compañeros sus puntos de vista y discuten, es realmente productivo ver como se entusiasman y se esfuerzan por mejorar, claro existen alumnos que tienen diferentes ritmos de aprendizaje, pero ver sus alcances por mínimos que sean me llena de alegría y satisfacción.
Existen situaciones que a veces me desmoralizan pero pienso que la tolerancia es la mejor forma de sobrellevar las cosas, , así que me dedico a mi profesión y con eso me basta por el momento.
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